En la industria farmacéutica la confianza es lo más valioso de la relación que se establece con los consumidores. ¿Qué lecciones le puede dar el marketing a este sector?
Los aprendizajes que se han adquirido en la historia del consumo, pueden servir de gran ayuda para la industria farmacéutica a fin de optimizar el vínculo con los clientes que llegan a ella en busca de soluciones a problemas específicos que los acechan.
1. Reorganizar las compañías desde el interior
La industria farmacéutica debe contar con un departamento de marketing con figuras como el Brand Manager. Muchas veces se descuida este sector sin pensar en la evolución de marca tanto interna como externa.
El Brand Manager es responsable de facilitar “la identificación de la esencia de la marca, su identidad, su imagen” y dirigir equipos de Product Manager más enfocados en el desarrollo y la comercialización de los productos.
Es decir, mientras el producto responde a una necesidad concreta, la marca genera “experiencia en contacto directo con las personas”.
2. No perder de mira los objetivos
El cliente debe estar situado en el centro de la estrategia de construcción de marca, sin olvidar que este cliente es un paciente médico. En este sentido, hay que proteger la triangulación entre médico, farmacéutico y pacientes sabiendo que este último pasa a tener un rol activo en la estrategia a fin de solucionar su necesidad.
Al considerar el rol del paciente como un sujeto activo en la triangulación, el packaging y diseños de material POP para puntos de venta pasan a tener un papel importante, sobre todo en productos del segmento complementarios, como cosmética, higiene, etc.
3. Hacerte ver, y hacerte conocer en valores
La experiencia de venta es multicanal y multistakeholder con la marca: todos los esfuerzos confluyen en aportar valor además de la notoriedad. Los prescriptores necesitan argumentos para una correcta transmisión de los valores de la marca y de sus productos.
En este punto, el mundo digital es la oportunidad del siglo para mejorar la experiencia de marca y potenciar la relación con el cliente, al personalizar el engagement con estrategias y diseños exclusivos.
En resumen, las marcas de la industria farmacéutica deben edificarse considerando los principios del branding para capturar la confianza de los clientes y lograr pacientes-consumidores que sean fieles, los recuerden y, sobre todo, recomienden 🙂
