Cuando hablamos de packaging para niños tenemos que pensar en una doble estrategia de comercialización por sus dos públicos objetivos.
No sólo el envase deberá complacer a los adultos que realizarán la adquisición, sino que además tendrá que ser principalmente atractivo para los menores, sobre todo cuando hablamos de alimentos ya que el empaque podrá influir en la aceptación o no de su consumo.
Según estudios de marketing, los niños en la actualidad ya conocen a las marcas desde cada vez más temprana edad por la influencia de la publicidad televisiva y los mensajes que reciben a través de diversas plataformas digitales, como redes sociales, páginas de videos y juegos online gratuitos con anuncios inmersos.
En virtud de las particularidades del mercado infantil, aquí cinco claves para el diseño de envases en alimentos para niños:
#1. El color importa
Como hemos mencionado en diferentes oportunidades sobre la posibilidad de transmitir emociones a través del color del packaging, en el caso de los niños este atributo será vital para referenciar a la alegría, la diversión y, sobre todo, captar su atención.
#2. Forma original
Otro componente para brindar originalidad y destacarse en las góndolas es la estructura, ya que la forma y la composición deben ser parte de la identidad de la marca, para que el producto se diferencie frente a las otras ofertas del mercado. Veamos este ejemplo de yogurt con forma de gorra:
#3. Reflejar la identidad de Marca
Como en todo proyecto de packaging, el diseño debe guardar coherencia con la identidad de la marca y sus valores. Por ejemplo, con propuestas ecofriendly que dan cuenta de la importancia del cuidado del ambiente y de educar a los niños en función de un planeta más sano.
#4. No se olviden de los padres
A través del packaging la empresa puede ofrecer a los adultos algo más que un alimento para sus hijos. Por ejemplo la comodidad de reemplazar la tapa de un yogurt con la tetina del biberón, o un juego para ayudar a adquirir snacks más saludables.
#5. Responder a las regulaciones
Como todo packaging debe ser acorde a las normativas del país, pero principalmente en niños la información nutricional, la edad a partir de la cual está permitido dicho alimento y los datos de la empresa, deben estar accesible para la consulta de los padres.
Las marcas deben reconocer al packaging como un arma de atracción. Los niños dan especial atención al envase, su forma, su color y sus ilustraciones. En ellos, el empaque de los alimentos será muchas veces determinante para el éxito de la comercialización.