El poder de los niños al momento de decidir la compra de un producto destinado para ellos es muy importante. Este dato es bien conocido por las agencias de marketing y publicitarias.
Por ello, es que el marketing para promocionar golosinas, en su mayor parte está basado en marketing infantil. Es bien sabido que los padres invierten mucho más en las marcas que sus hijos prefieren.
Marketing infantil aplicado a las golosinas
La edad que más influencia tiene en la toma de decisiones de compra de un producto es de los 3 años en adelante. Por lo que el marketing a aplicar debe ser “doble target”. Es decir, que atraiga a los padres y a los hijos.
Consecuencias positivas del marketing infantil
- Los padres compran lo que los niños piden
- Los niños son futuros adultos. Las marcas que prefieran de niños serán las que consuman cuando ya sean mayores
En este sentido, la estrategia necesaria para captar el interés de los pequeños es totalmente diferente, de ahí que interpretar su lenguaje es fundamental para lograr el éxito de una campaña publicitaria. Por eso, a continuación citamos los siguientes consejos:
1) Es conveniente que el packaging de la golosina incluya la caricatura preferida o que esté de moda.
2) Incluir en el packaging de la golosina un juguete. La golosina se termina y el juguete queda 😉
3) Ofrecer la colección del producto que acompaña a la golosina. Así se asegura la compra de la misma por un período más o menos prolongado.
4) Internet es una posibilidad de juego y diversión para los niños de hoy. Por ello es que una buena opción es crear una web que represente a la golosina con las mismas características del packaging, que ofrezca entretenimiento para los más pequeños.
5) Al momento de exhibirlas, las golosinas que son dedicadas a los más pequeños deben ser expuestas en el exhibidor a la altura de sus ojos, para que sea lo primero que vean, al ingresar al comercio. El exhibidor debe tener las mismas características del packaging.
En definitiva, el packaging es una herramienta de marketing muy potente y puede llegar a convertirse en el único motivo por el que se elija el producto. Esto se intensifica, ¡si el producto es una golosina para los más pequeños!
