Cuando alguien entra a una empresa, como proveedor o cliente, lo primero en que se fija es en la decoración de las oficinas. Sea un negocio o una empresa, la imagen que se quiere proyectar acerca de la marca, deberá estar plasmada en la imagen que se da. La imagen está relacionada con el nombre y la misión de la empresa. Es parte de un todo
Según la Universidad de Exeter, la decoración de los espacios de trabajo incide en la forma en que los empleados trabajan. Pero además, este estudio dice que en las empresas donde los empleados ayudan en la decoración, aumentan su rendimiento en un 45% más.
¿Por qué es tan importante la decoración de las oficinas para una marca?
Para muchos, empleados o personal jerárquico, la oficina es el lugar que más tiempo se está en el día. Por esto, el lugar debe ser lo más confortable posible, haciéndolo más funcional que estético, pero sin descuidar esto último.
En los entornos empresariales, la competitividad es materia habitual, por lo que se debe favorecer la comunicación y el trabajo en equipo. Así, el mobiliario debe ser, más que un costo, una inversión, para favorecer este tipo de cooperación.
Es importante crear oficinas con decoraciones armónicas, tanto de mobiliarios como de elementos necesarios. Todo este entorno estará presente en la actividad interna de la empresa, como en la visita de los clientes.
¿Cómo debe ser esa decoración?
Para la elección del mobiliario y la decoración de estos sitios, hay que planificar primero el espacio disponible. Debe ser adaptado al tipo de trabajo que se va a desarrollar en la oficina, (ventas, atención al cliente, compras, personal, u otras).
Sea del rubro que fuera, toda visita que pase por una oficina, se va a llevar una primera impresión de su decoración. Esta impresión es la que cuenta y debe ser lo más agradable posible, como si fuera una carta de presentación.
Es importante que la decoración de las oficinas cree un ambiente cálido, sobrio, idóneo y relacionado con la actividad desarrollada por la empresa. Deben prevalecer los colores que identifican a la marca. Si el público tiene acceso, que se sienta cómodo, con una decoración que sorprenda y llame la atención, siempre en forma positiva.
De todas formas, por mejor que se decore una oficina, el trato que se le dispensa al público debe estar acorde. Si cada cliente que visita una oficina de la empresa, se lleva toda una experiencia de esa visita, hablará bien de la marca.
En muchas empresas, el primer contacto que tiene el público o los clientes, es la oficina de recepción. La decoración y el mobiliario de esta oficina, hablará por sí sola de la filosofía y organización de la empresa.
Por supuesto que el interior de la empresa debe tener relación con la decoración de la recepción. La decoración en general puede influir en generar una reputación para la empresa.
Decoración y confort son igualmente importantes
Dentro de la empresa, la decoración debe centrarse en la comodidad y estética, más un entorno laboral agradable. Los empleados pasan muchas horas allí, por lo que la ergonomía debe ser uno de los puntos a satisfacer.
El confort también importa, estar sentados muchas horas puede ser estresante, por eso el mobiliario debe ser placentero. En una oficina, la parte estética es importante, pero no se debe privar la parte funcional, para que sea una oficina cómoda. Esto promueve la productividad.
En pocas palabras, la imagen que da una oficina debe expresar lo que la empresa es, y los clientes que visitan la oficina, lo deben sentir. La decoración y mobiliario se debe acompañar de los tonos de las paredes, el techo y la limpieza.
Algunas empresas le dan más importancia a la parte de recepción, y a la de atención al público. Descuidando el lugar que ocupan los empleados en la empresa, y precisamente este es un error.
La decoración de las oficinas debe ser acorde en todos los sectores de la empresa, debe ser armónica. Si se pone énfasis y dedicación a un sector, debe ser igual en el resto de los espacios.
En las oficinas deben estar a gusto clientes, empleados y colaboradores, del mismo modo. Es parte de la misión de la empresa