Un momento crucial para nuestro producto es el momento en el que el potencial cliente se encuentra con el local de compra. Más allá del producto en sí, o de las ideas preconcebidas que el cliente pueda tener, en ese momento podemos influir en su estado de ánimo y percepción para determinar la compra.
A continuación, te mostramos qué elementos influyen en el proceso de compra.
Psicología de la venta: ¿Cómo vender más productos?
Localización
Los productos que se sitúan a la altura de nuestros ojos siempre van a ser los primeros que llamen la atención ya que entran en nuestro campo de visión sin que los estemos buscando específicamente.
En cambio, los productos ubicados a la altura de nuestros pies o por encima de nuestra cabeza atraerán menos, además de que resultará incómodo para el cliente tratar de alcanzarlos.
Contexto y espacio
Por otro lado, también influye el ambiente en el que se encuentren. Los productos espaciados entre sí transmiten prestigio y atraen la mirada del cliente, mientras que si están encimados distraen la atención y pierden valor.
Además, los productos cercanos a la caja tienen muchas más oportunidades de ser comprados, porque es el lugar donde tenemos que esperar más tiempo y posibilitan la compra de productos que el cliente no necesita, pero que le gustan.
Color
Un color vivo llama mucho más la atención que uno frío y además existe un lenguaje psicológico que influye en nuestros hábitos de compra; el rojo, por ejemplo, incita a comer, el azul sugiere frío y el verde, naturaleza.
Es importante determinar el color de nuestro packaging en función de nuestro producto y de lo que queramos transmitir.
Precio
El consumidor busca el precio más barato, pero además, está demostrado que el precio psicológico influye mucho a la hora de comprar un producto, como por ejemplo usar decimales o poner el precio en función de gramos o kilos y no el precio real.
Música
Dentro del proceso de la psicología de venta, la música influye en el estado de ánimo del cliente. Una música relajada mejorará su humor y aumentará sus ganas de comprar, pero una música rápida, por ejemplo, incitará a una compra rápida e irreflexiva.
Olor
Finalmente, al igual que la música, el olor influye en el ambiente y determina la compra. Un olor agradable mejorará el humor. Por ejemplo, el olor a comida incitará el hambre, y en cambio, un olor poco agradable provocará que el cliente quiera abandonar el establecimiento cuanto antes.
Así que si querés aumentar las ventas, tené en cuenta todos estos consejos a la hora de ofertar tus productos y servicios. ¡Creá un ambiente ideal para la compra!