Quizá pensamos que podemos responder fácilmente a esta pregunta. Un director de empresa podría referirse a las acciones visuales que comunican lo que la marca es y ofrece a las personas, hasta aquí todo bien. Pero, entonces, ¿qué es la marca?
Aquí podemos encontrar muchos tropiezos, ya que para muchos la marca la representa el logo o logotipo de la empresa, mientras que para otros la marca es mucho más que una identidad visual: conlleva conceptos y valores que simplemente van más allá de una imagen.
La definición de la AMA (American Marketing Asociation) nos dice textualmente lo siguiente cuando preguntamos ¿qué es branding? : “Un nombre, signo, símbolo o diseño, o una combinación de ellos, cuyo fin es identificar los bienes o servicios de un vendedor o grupo de vendedores y diferenciarlos de su competencia”.
Esta definición fue válida hasta cierto punto, pero luego llegaron los medios sociales, la era de la comunicación y con ella la voz de los clientes se hizo escuchar y todo cambió. Hoy por hoy la identidad de marca y su concepto está definida en un gran porcentaje por lo que la gente piensa de esta y esto proviene esencialmente de la experiencia de las personas con la marca.
Tu estrategia de branding puede ser proyectar una imagen fresca, juvenil, pero el lenguaje que usa y la imagen visual no estar en consonancia con el concepto, lo que llevará a que el público la perciba de una manera equivocada.
Por otro lado, la imagen de la marca debe ser consecuente con la identidad que quiere transmitir y es aquí donde entra en branding de una empresa. Una compañía, desde sus inicios debe dejar bien claro tres cosas:
- Quién es
- Cuál es su concepto
- Cuál es su propuesta de valor
Los clientes perciben a través de lo visual lo que tu marca quiere transmitir, pero es en el momento del contacto donde esa imagen, esa identidad, quedará grabada en su mente. Es esencial que toda la estrategia de branding: logo, tipología, colores, etc, esté enfocada a entregar un mensaje conciso e inolvidable a la mente del consumidor.
