La reputación de una empresa es un asunto sumamente delicado, no es algo con lo que se puede jugar. Muchas veces, una vez perdido ya no se puede recuperar, o hay que hacer grandes inversiones en estrategias y campañas para que las cosas vuelvan a la normalidad después de una crisis de imagen.
1. Identidad no consistente
Se trabaja duro en la estrategia de branding de una empresa. No es tarea fácil construir una identidad y luego comunicarla al público y de pronto lanzás un producto que no tiene relación alguna con esa imagen que tanto costó construir. Cuando un producto no es consistente con la imagen de marca no será bien recibido por el público.
2. Mala actualización con las tendencias
Es necesario estar acorde con las nuevas tendencias de imagen y diseño, eso no se pone en duda, pero cuando la actualización se realiza de manera exagerada o demasiado marcada, la diferencia suele no tener la penetración en el público que se espera.
3. Perder de vista tu origen
Dejar de lado los valores y principios que dieron origen a nuestro mensaje en primer lugar puede resultar en que las personas también pierdan de vista ese toque que nos diferencia de las otras marcas y perder su confianza.
4. Asociaciones equivocados
Como decíamos, construir el branding de una empresa es una trabajo importante, es lo que la diferencia de otras marcas. Por lo tanto si decidís asociarte con otra marca esta debe estar relacionada con el sector y ambas deben complementarse. Si nos asociamos con la marca equivocada estaremos confundiendo al público, lo que hará que nos abandonen.
5. Ignorar las diferencias culturales
Tu marca podría no ser global ahora, pero con el uso de los medios sociales tu mensaje puede llegar a diferentes países con culturas diferentes. Por eso hay que tener cuidado para que los medios y nuestro mensaje no sean ofensivos para algún grupo de personas.
6. Mal manejo de una crisis
Las crisis van a pasar y hay que estar preparado para ellas. Muchas veces la crisis inicial no es tan grave, pero el mal manejo, la intolerancia y arrogancia de las marcas en no aceptar sus errores, puede ser letal para la imagen de esa marca.
7. No respetar la voz de la marca
Una parte importante de lo que es la marca se refleja en el lenguaje que utiliza. Este debe estar acorde con el mensaje, valores y público objetivo, sino, sonará falsa y artificial.
Evitá esto errores para no caer en una crisis de la cual tu marca podría no recuperarse jamás.